Ruta circular de dificultad baja. Bien señalizada. Está en Navalagamella, Sierra Oeste (Comunidad de Madrid).
Nos levantamos el domingo sin madrugones ni prisas y durante el desayuno decidimos que nos apetecía dar un paseo por el campo y comer en algún pueblo, no demasiado lejos de Madrid.
Elegimos esta ruta porque era cortita y circular. Nos llevó dos horas y media completar el recorrido que es muy sencillo y tiene encanto. Pasamos junto al río Perales que en este tramo es estrecho y en alguna parte lucía espectacularmente verde por las algas que crecen bajo su cristalina superficie. También pasamos por las ruinas de los molinos.
El paisaje es variado, por lo que el recorrido se hace muy ameno, y a medio camino hay zonas con mesas y bancos para comer junto al río.
Comimos en Navalagamella.
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